Page 104 - ÑUBLENSE 100 AÑOS
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1 0 0 LA HISTORIA DEL PENAL PERDIDO
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102 QUE CONDENÓ AL GOLEADOR
Tras asegurar el ascenso a Primera División, La puso en el césped y marró el lanzamiento
Ñublense tenía la opción de ser campeón si ante la rabia del técnico Marcoleta y la frustra-
vencía a Lota Schwager en Collao y Melipilla ción de la hinchada roja.
enredaba puntos en Curicó. “La verdad es que en el desayuno de la
Más de diez mil chillanejos tiñeron de rojo concentración Carlos me había dicho que si
el sector Tegualda del estadio regional. había algún penal se lo dejara tirar a él porque
Ñublense comenzó ganando con un gola- quería ser goleador y yo le dije que no tenía
zo de Mauricio Villanueva, pero el goleador problemas”, cuenta Zanatta.
de los carboníferos Patricio Morales, puso el El capitán del equipo esa tarde, Edgardo
empate e igualó como artillero de la B a Car- Abdala, desclasifica su versión.
los Cáceres. “La verdad es que yo le quité la pelota a Néstor.
Sin embargo, en la recta final del duelo, llegó El destinado para tirar el penal era Zanatta y yo
la jugada que pudo cambiar la historia. Penal -saltándome el protocolo- conversé con Nés-
para Ñublense y todos pensaron que Zanatta tor y le pedí que le diera el penal a Carlos para
volvería a inscribirse en la historia desde los premiarlo con la opción de que fuera el golea-
doce pasos, pero le cede el servicio a Carlos dor. Mientras tanto, Marcoleta vuelto loco en
Cáceres. la banca, gritando que lo tire Zanatta y le quito
la pelota y se la paso a Cáceres: “toma Carlitos,
te lo mereces, y me dice, gracias Turquito”. Y lo
pierde. Marcoleta estaba como loco.”
A una década de esa jugada clave, el téc-
nico Luis Marcoleta explica por qué esa deci-
sión le costó a Carlos Cáceres no renovar en
Ñublense. “Fue emocionante ver una bandeja
llena de camisetas rojas. Eso fue espectacular.
Carlos estaba peleando el título de goleador
con Patricio Morales de Lota, estaban empata-
dos y veo que toma la pelota y me comienzo
a desesperar, porque no estaba autorizado a
patear y le gritó a Néstor que lo pateara él. Por
una desobediencia se perdió la opción de ser
campeones. Yo me fui para el camarín moles-
to. No vi el penal. Esa campaña la debimos
coronar con el título. Yo siempre velé por el
equipo y no por la individualidad”, sentencia
Marcoleta.
“Me dolieron las palabras de Lucho (Mar-
coleta), porque después nunca más habló
conmigo. No fui egoísta, Néstor y Edgardo
también estaban de acuerdo y me tocó fallar”,
dijo Cáceres.
Yo le quité la pelota a
esa temporada jugó en calidad de invitado en el a la solidaridad en ese momento. Nuestro Señor Zanatta y se la pasé
Torneo de la Primera B. nos ayudó, fue la voluntad de Dios que subiera
El técnico Luis Marcoleta recuerda ese choque Ñublense, es uno de los momentos más espe- a Carlos (Cáceres), le
épico con San Felipe como un ejemplo de fuerza ciales de mi vida”, sentencia el “Gringo”, ahora dije ‘toma Carlitos, te
y superación. sacerdote radicado en Estados Unidos.
“El ambiente era espectacular. Yo para variar El carnaval se desató en la Plaza de Armas hasta lo mereces por todo lo
estaba suspendido. Estaba en la tribuna oficial y donde arribó el bus con los jugadores eufóricos y
no me podía acercar. Comenzamos perdiendo los hinchas saltando sobre el techo para festejar que nos diste. Me dice
dos a cero (goles de Jaime Lira 7’ y Víctor Gon- hasta altas horas de la noche. ‘gracias Turquito’. Pone la
zález 24’), jugando de manera trababa, hasta que “Hoy todos somos campeones. Este título es
Zanatta hace el 2-1 y Carlos el 2-2. Fue parejo el de la hinchada que nos apoyó siempre. Ahora pelota en el punto penal
segundo tiempo, hasta que llegó el penal en los somos de Primera”, vociferó Sergio Zarzar micró- y se lo pierde. Marcoleta
descuentos. Yo estaba ansioso. Previo a la eje- fono en mano sobre el escenario dispuesto para
cución, alguien me abraza la pierna, era mi hija la celebración. se quería morir...”
pequeña Lorena y al rato llega mi señora, así que El trabajo del directorio encabezado por Zar-
viví ese momento con mi familia. Tuve la dicha de zar fue trascendental. La base armada el 2004
vivir en la banca y luego en la tribuna con la gente permitió la prolongación de una planificación
esa emoción. Quedábamos a un partido de salir sustentada en la austeridad, visión de conjunto
campeón”, cuenta Luis Marcoleta. y unidad. “Lo primero fue reunir a un grupo de de la Comisión Fútbol), los hermanos Leonardo
El zaguero norteamericano, Chase Hilgenbrinck amigos que querían hacer algo por la ciudad y se y Alfonso Cusacovich, Juan Ramírez, Jack Behar,
no tiene dudas. Esa tarde un milagro se produjo identificaban con Ñublense. La hinchada nos apo- además de dirigentes incansables como Claudio
en el estadio “Nelson Oyarzún”. yó de inmediato porque vio buenas intenciones Pino y Hernán Ramírez, y el aporte futbolizado
“Pensaba cómo remontamos este dos a cero, y transparencia administrativa. El final fue feliz al del coordinador técnico René Antonio Rubio.
pero en el camarín sabíamos que íbamos a sacar el primer año porque salimos campeones de Ter- “Esta gloria es de Dios, es para Él y esta gente”,
resultado, nunca dejamos de creer, sabíamos que cera y tres años más tarde logramos ese ascenso agregó Chase Hilgenbrinck.
íbamos a dar vuelta el partido. Se notó la mano espectacular”, recuerda el ex presidente rojo, “Dios es el pilar de mi vida. Esto es un milagro”,
de Dios. Fue el momento de Ñublense. Estaba quien tuvo un gran equipo de trabajo en el que sentenciaba entre lágrimas Marcoleta, con un mar
muriendo el padre de Patricio Araya y llegamos destacaban Iván Badilla, Francisco Rossler (timonel rojo de fondo en la Plaza de Armas.