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22 05.FEBRERO.2020

1887 1887 1887 1888 1888 1889 1889 1890
El día 14 de marzo, la lo- Nuevos territorios rurales de Egresan las primeras pro- Un día 17 de mayo nace en 20 de agosto: Se funda el 31 de marzo: En París (Francia) Se funda el Instituto Pedagó- Termina la construcción del
calidad de Bulnes, ubicada Ñuble suben de categoría. fesionales universitarias de Chillán el comodoro Arturo Museo de Bellas Artes de se inaugura la Torre Eiffel. En gico, como dependencia de viaducto del Malleco, puente
25 kilómetros al sur de El 12 de agosto se funda Sudamérica: las chilenas Merino Benítez, conside- Chillán, que contribuye a Chile, tres construcciones la Universidad de Chile, con ferroviario chileno ubicado so-
Chillán, recibe el título de la comuna de Coihueco y Eloísa Díaz y Ernestina Pérez, rado hasta la fecha como generar en la ciudad un llevan su firma: la Aduana, la el objetivo de formar profe- bre el río Malleco, en Collipulli,
ciudad por parte del Estado Pinto obtiene su título de tituladas de médico en la U. el prócer de la aviación circuito de cultura y expo- Catedral de San Marcos y la sionalmente al profesorado Región de la Araucanía. Tiene
chileno. ciudad. de Chile. chilena. siciones. Gobernación de Arica. de la educación secundaria. 102 metros de altura.

Jorge Silva Silva: El hombre

que modernizó La Discusión

Tomó al periódico en un momento difícil. Venía de los diarios grandes, donde triunfó gracias a su talento,
honestidad y cultura, y a poco andar, lo situó en el contexto local y nacional. Se transformó, además, en
una de las voces más escuchadas en todos los asuntos de interés público y social en Chillán.

por: isabel charlin *[email protected]
fotos: archivo la discusión
P ara el centenario de La Discusión, en 1970, rimentado capitán supo llevar desde el primer
Según describe Manuel Gandarillas, el expe-
Manuel Gandarillas dedicó un extenso
momento a la vieja publicación, sin apartarse
artículo a la gestión, como director-pro-
pietario, de Jorge Silva Silva.
A juicio del redactor, Silva “hizo el
heredara de su fundador, Juan Ignacio Monte-
diario moderno”, luego que asumiera en 1926, La buena suerte nos del espíritu de honestidad e independencia que
negro. Le insufló nueva vida y una intensa acti-
tras la muerte de Ricardo Bañares. puso frente a la dirección vidad periodística.
Se trataba de un conocido y fogueado perio- de ‘La Discusión’. “Silva hizo de nuestro diario una publicación
dista que había iniciado su profesión en 1914, moderna, dotándola de todas sus secciones y
como redactor de “El Diario Ilustrado”. A pesar Todo era desaliento, presentando domingo a domingo una portada en
de su juventud, era un escritor hecho y derecho, el viejo diario parecía colores y una espléndida sección magazinesca,
y su nombre ya tenía un indiscutido prestigio de la cual carecían casi todos los diarios provin-
en la prensa y las letras nacionales. bambolearse, pero con ciales. Para lograr estos resultados, contó con la
Según relata Gandarillas, había librado bri-
llantes campañas en “La Unión” de Santiago, esfuerzo dedicación colaboración de su personal, que lo secundaba
con entusiasmo. Su ‘don de gente’ le permitió
y después en “El Día” y en “El Ferrocarril”. Se y mejorando todos siempre ser un jefe ecuánime y bondadoso,
destacaba por su cultura, y por su sólida base virtudes que nunca menguaron su condición
filosófica y literaria. los servicios, el diario de mando, que le permitía ordenar e imponer-
En 1918, sus condiciones de mando y orga- se sin gritos destemplados ni estridencias, tan
nización, unidas a su espíritu periodístico, lo adquiriría el prestigio y comunes en jefes nerviosos e ineptos”, escribió
llevaron al cargo de subdirector del “Diario el esplendor de siempre”. Gandarillas en su artículo de 1970.
Ilustrado”, en el cual demostró conocer a fondo Ayudado de su talento, de su honestidad y
su oficio, disponiendo campañas de bien públi- Jorge Silva Silva cultura, de su buen juicio y de su inagotable dis-
co. Tenía, además, el don de saber aprovechar ciplina de trabajo; a los pocos meses de estar en
las condiciones de trabajo de sus subalternos el diario Jorge Silva había dilatado su influencia,
Su prestigio periodístico, e incluso sus cono- 5.000
para ofrecer un diario novedoso, informativo y estableciendo agencias de ventas en todas partes,
muy bien presentado, para representar la eterna buscando suscriptores y corresponsales, y jun-
curiosidad de los lectores. tando y conquistando voluntades. Equilibrado,
observador; bondadoso cuando era necesario,
cimientos financieros, fueron poderosos ante- como implacable y acerbo cuando las circuns-
cedentes para ser llamado a la dirección de “La ejemplares tancias lo requerían, Jorge Silva llegó a ser en
Unión” de Valparaíso, cargo en el que supo dar lo Chillán uno de los hombres más oídos en todos
mejor de su espíritu y de su talento, demostrando de tiraje, con ediciones de 12 los asuntos de interés público y social.
su capacidad admirable para imprimir en el viejo páginas, logró Jorge Silva du-
diario los conceptos y la savia que requerían las Dúplex
modalidades del periodismo moderno. rante su dirección, lo que sig- Al poco tiempo de asumir, Silva reemplazó
En el diario porteño introdujo hábiles y nificó para la época un ver- el tipo viejo por linotipias, y la prensa chica por
oportunas reformas, enmendando antiguas dadero récord periodístico. una Dúplex, que había sido adquirida al Diario
deficiencias y dejando el recuerdo, al retirarse, “El Sur” y que imprimía cuerpos con bastante
de haber sido uno de los más talentosos y efi- rapidez. Montó también un taller de obras y
cientes directores que haya tenido “La Unión” uno de fotograbados que la crisis del año 1931
en su brillante trayectoria. lamentablemente aventó.
La puesta en marcha de la Dúplex fue todo un
Jorge Silva en La Discusión acierto, pues hasta entonces yacía olvidada en
Los conocimientos periodísticos de Jorge Sil- un rincón de la imprenta. Esta permitió lanzar
va y sus experiencias como gerente y hombre hermosas ediciones de 12 páginas con un tiraje
de empresa lo llevaron a Chillán. de cinco mil ejemplares, lo que significó para la
En 1926, tras la muerte del director, Ricardo época un verdadero récord periodístico.
Bañares, se hizo cargo de La Discusión como Jorge Silva dio, además, gran impulso a la
su director propietario. publicación en la década del 30, mejorando sus