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30 Domingo 15 de septiembre de 2024 www.ladiscusion.cl
Cultura
¿Patriotismo para qué?
ara potenciar lo mejor de Alemania y a Japón: castigar cualquier
lo humano, colaborarnos indicio patriótico como algo “malo”,
en el viaje sobre la mar “subversivo”, “nazi”, etc.
del tiempo y sentirnos Un país es un barco que busca el
Pen una misma nave ayu- vellocino de oro del “buen vivir”, ese
dándonos a ser mejor capitán de ¿Para qué construir un país si va a ser como las demás? precioso concepto indígena [küme
nosotros mismos. Es la respuesta No tiene ningún sentido repetir la misma historia ya mongen, en mapuche] del noble y
que hoy me brota fácil, cuando se alto vivir que le corresponde a la
han desenmascarado las fuerzas agotada del Viejo mundo, la gris historia moderna de identidad humana. Su historia parti-
que nos manipulan como comu- las urbes europeas de postguerra que dejaron de encar- cular es un viaje, una aventura digna
nidad de países y naciones y que de vivir, aunque viaje con aparejos
conducen la globalización hacia la nar un ideal de civilización. Sólo nos justificamos aquí débiles y con una lona podrida. No
esclavitud y dependencia común. si tenemos un sueño programático en común” es un préstamo a interés del Fondo
Porque el objetivo del globalismo Monetario Internacional. Es una nave
-en el caballo de Troya del control que se la juega en la mar del tiempo
digital, del fomento migratorio, y apuesta por un puerto lejano, no
etc.- no es la elevación de la con- el escuálido reparto de las tasas
ciencia sino el dominio financiero, que hace a las economías pobres el
descartando todo pensar distinto y Federal Reserve ni los restos de un
con ello eliminar los rasgos únicos viejo botín político maloliente. El
Ziley Mora Penrose de cada rostro humano. sentido del patriotismo de un país
Escritor, etnógrafo y filósofo La guerra declarada a esta nación como lo es Chile es trazar una odisea,
del sur es fulminar su identidad. un apasionado derrotero bajo la Cruz
Entonces, conservar en estos del Sur, aunque las tablas de la quilla
días el izamiento de la bandera que hagan agua. Es un viaje de travesía,
identifica a esta particular “nave”, la no una costanera marginal a orillas
memoria colectiva, el desfile de los de una megametrópolis. Un país es
escolares, de los bomberos, los clu- un gesto de rebeldía que se zafa del
bes de huaso, de la tercera edad, los destino común. “¿Para qué construir
pueblos originarios y desde luego, la un camino si éste no conduce a una
marcha de los militares, es conservar catedral?”, se preguntaba el poeta
la diferencia. Es la exteriorización Elliot. ¿Para qué luchar por un país
de un sentimiento que a lo largo de que solo me ofrece desvivirme en
la historia se ha prestado para las un empleo trabajando 40 horas se-
acciones más sublimes, pero tam- manales? Aunque sean 20, siempre
bién las más miserables. Estamos de serán alienantes las horas de trabajo
acuerdo. Pero si hoy no marcamos si sólo trabajamos por plata. Porque
la chilenidad con algo externo, con sólo las cuentas baratas las paga el
algún distintivo, con una bandera, sueldo del trabajo, porque las caras
con una música criolla o una comida las paga el trabajo del amor, ese
típica, estamos dando la señal a las nacido del entusiasmo del Ser. Por
jóvenes generaciones de que cada tanto, ¿para qué construir un país si
ser humano no es un individuo va a ser como las demás? No tiene
con singularidad histórica, sino un ningún sentido repetir la misma
mero número reductible a ser masa historia ya agotada del Viejo mundo,
manipulable. Qué duda cabe que la gris historia moderna de las urbes
hoy vivimos una transición donde europeas de postguerra que dejaron
se nos quiere imponer una sociedad política nos vuelve más vulnerables de heroísmo, hacerle marchar al de encarnar un ideal de civilización.
multicultural como resultado tanto de a lo que parece ser la pandemia de compás de los intereses de la banca. Sólo nos justificamos aquí si tenemos
acentuar las diferencias con nuestro nuestra época: desfondar el alma Y con ello quitarle su substancia un sueño programático en común.
pueblo originario, desconociendo de los pueblos, uniformar y nivelar propia, su identidad. Porque sin ¿Y de dónde sacarlo? ¿Quién debería
nuestro evidente parentesco y mes- los espíritus, promover las guerras identidad, todo país se volverá entregárnoslo? Pues, repasando las
tizaje con él, como con el proceso tribales, el etnocentrismo y la xe- más débil, sin producción propia, viejas narraciones casi míticas de
migratorio, el que deliberadamente nofobia. ¿Qué se pretende? Pues, más y más dependiente de la oferta nuestro telúrico paisaje, de nues-
las fuerzas obscuras del globalismo desorden y violencia al interior de consumista global. Se nos aplica la tra historia, de nuestros héroes y
han maniobrado. En fin, toda esta una nación, borrarle toda memoria estrategia cultural que ha sometido a heroínas.
Panoramas.
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