Page 31 - Diario 24/11/2024
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        Cultura









        Entre luces, carteles y raíces







                as ciudades respiran a                              de referencia, pero también en   nuestra ciudad? ¿Sus imágenes nos
                través de sus imágenes.                             marcadores emocionales. Roland   ayudan a orientarnos, a sentirnos
                Todo lo que vemos –des-                             Barthes, en La cámara lúcida,   parte de ella, o nos alienan en su
                de los carteles vibrantes                           sugiere que “la luz es la memoria   exceso?
        L que saturan las avenidas                                  del instante congelado”. Las luces   Los murales y las intervencio-
        hasta la quietud de un árbol que   El cartel publicitario   de una ciudad no solo iluminan   nes artísticas que ocupan muros
        desafía el concreto– nos cuenta                             caminos; evocan historias. Piensa   en desuso ofrecen otro ángulo
        algo sobre su alma.           es un grito en medio          en la cálida luz ámbar de una calle   de esta conversación visual. Más
          Pero, ¿qué percibimos realmente                           empedrada o en la frialdad blanca   que elementos decorativos, son
        en este constante flujo visual?   del bullicio urbano. Su   que acompaña avenidas sin rostro.   relatos visuales que trascienden lo
        ¿Qué nos dice la ciudad cuando   diseño busca capturar      Este juego entre luz y percepción,   ornamental. Un mural puede ser
        nuestras miradas se encuentran                              entre la estética y la funcionalidad,   una protesta o una celebración,
        con sus colores, sus luces y sus   nuestra atención en      nos habla de cómo las ciudades   pero siempre es un diálogo con
        sombras? Walter Benjamin, en                                buscan moldear nuestra expe-  quienes pasan frente a él.
        su célebre ensayo El narrador,  segundos, utilizando        riencia nocturna, como si fueran   “El arte callejero es la voz de las
        nos invita a detenernos: “Las                               escenografías vivientes.     ciudades que no temen ser escu-
        cosas vivas iluminan cuando se   tipografías que pare-       Y sin embargo, es en la naturaleza   chadas”, afirmó Banksy en una de
        las observa; y en la ciudad, todo   cen gritar y colores    donde las ciudades encuentran   sus escasas entrevistas públicas. Y
        vive si la mirada sabe interrogar”.                         su pausa. La arborización, tantas   cuando estos murales se cruzan
        ¿Estamos realmente mirando, o   que invaden la mirada.      veces vista como un detalle secun-  con la arborización o con la luz
        solo pasamos de largo?                                      dario, cumple un papel central en   tenue de un poste, el resultado es   Alejandro Arros Aravena
          El cartel publicitario es un grito  Gilles Lipovetsky, en “El   el equilibrio visual y emocional   un cuadro urbano en constante   Doctor en Educación, Académico
        en medio del bullicio urbano. Su                            del espacio. Un árbol solitario en   movimiento.           Departamento de Comunicación
        diseño busca capturar nuestra   imperio de lo efímero”,     medio de una plaza se convierte en   Sin embargo, no todas las ciu-  Visual UBB
        atención en segundos, utilizando   lo definió como un arte   símbolo de resistencia. Jane Jacobs,   dades nos invitan a detenernos.
        tipografías que parecen gritar y                            en Muerte y vida de las grandes   En muchos casos, los carteles   con poesía significa reconocer que
        colores que invaden la mirada.   del instante: “El anuncio   ciudades americanas, señalaba: “Los   saturan el paisaje, las luminarias   cada elemento visual –desde un car-
        Gilles Lipovetsky, en El imperio                            árboles no solo oxigenan la ciudad;   ciegan más de lo que iluminan, y   tel hasta un parque urbano– tiene
        de lo efímero, lo definió como un  es la verdad de lo tran-  oxigenan el alma de quienes cami-  los árboles se convierten en adornos   algo que decirnos sobre quiénes
        arte del instante: “El anuncio es la                        nan por ella”. Hay una especie de   aislados. Este exceso de estímulos   somos y cómo vivimos.
        verdad de lo transitorio, la poesía   sitorio, la poesía de la   diálogo mudo entre el concreto y las   puede generar una desconexión   Las ciudades no son solo mapas;
        de la velocidad”.             velocidad”. Pero, ¿cuán-      raíces, entre el diseño planificado   emocional. Martin Jay, en La ima-  son narrativas vivas que se cons-
          Pero, ¿cuánta poesía queda en un                          y la vida silvestre que se cuela sin   ginación dialéctica, reflexiona: “La   truyen y deconstruyen constan-
        cartel que compite con otros mil   ta poesía queda en un    invitación. Este contraste, lejos de   sobreabundancia de imágenes no   temente. Cada cartel publicitario
        en un paisaje visual saturado? El                           ser una simple oposición, es una   ilumina; oscurece, despoja al es-  que es reemplazado, cada árbol
        ojo humano, acostumbrado a los  cartel que compite con      invitación a reflexionar sobre cómo   pacio de significado”. Aquí radica   que florece en primavera, cada
        ritmos digitales, se desliza entre                          percibimos nuestras ciudades:   el desafío: rediseñar las ciudades   farola que se apaga, contribuye
        imágenes, buscando anclarse en   otros mil en un paisaje    ¿como entornos artificiales o como   para que sus imágenes no solo se   a la historia que la ciudad cuenta
        algo más duradero. Tal vez por   visual saturado? El ojo    extensiones de lo natural?   vean, sino que se sientan.    sobre sí misma. Lo que queda por
        eso, la estética urbana de las ciu-                          La estética urbana es el último   ¿Cómo lograrlo? Quizás el primer   definir es si estamos dispuestos a
        dades más reconocidas combina   humano, acostumbrado        hilo que conecta estos elementos. En   paso sea escuchar lo que la ciudad   escuchar, si somos capaces de mirar
        deliberadamente estos elementos                             las ciudades bien diseñadas, todo   ya nos dice. Detenerse frente a un   más allá de lo evidente.
        efímeros con lo perenne: edificios  a los ritmos digitales, se   parece estar en su lugar, incluso lo   mural, caminar bajo la sombra de   Así como el gran Ítalo Calvino
        históricos, murales cargados de                             caótico. Los colores de las fachadas,   un árbol, observar cómo las luces   plasmó en su texto: Las ciudades
        simbolismo y la presencia de lo   desliza entre imágenes,   los patrones de los adoquines,   se reflejan en las ventanas de un   invisibles: “La ciudad no cuenta su
        natural.                      buscando anclarse en          los grafitis que convierten un   edificio.                 pasado; lo contiene como las líneas
          En la noche, las ciudades se trans-                       muro gris en un manifiesto: cada   El filósofo Gastón Bachelard, en   de una mano”. Nuestra tarea es leer
        forman. La luminaria urbana dibuja   algo más duradero.     detalle suma. Kevin Lynch, en La   La poética del espacio, lo resumió   esas líneas, aprender a mirar con
        nuevos contornos, oscureciendo lo                           imagen de la ciudad, escribió: “La   mejor que nadie: “La ciudad es un   detenimiento y reconocer en cada
        visible y acentuando lo invisible.                          identidad de una ciudad reside en   refugio del alma si aprendemos a   imagen urbana una oportunidad
        Las farolas se convierten en puntos                         su legibilidad”. ¿Qué tan legible es   habitarla con poesía”. Y habitarla   para sentirnos parte del todo.



        Talentos culminan sus “Lecciones de Piano en la Casa


        Arrau” y se preparan para la gala este 5 de diciembre




        Con la quinta jornada, concluyeron las sesiones del proyecto “Lecciones de Piano en la
        Casa Arrau”. La iniciativa, impulsada por la Municipalidad de Chillán a través de su Dirección
        de Cultura, Artes y Patrimonio, en colaboración con el Museo Claudio Arrau León, culmina
        con una gala, el próximo 5 de diciembre en el Teatro Municipal.
        “Esperamos que la comunidad asista a la presentación de estos jóvenes que han formado
        parte de esta quinta versión, la cual busca promover el desarrollo artístico y cultural a tra-
        vés del estudio y la interpretación pianística en niños y jóvenes”, destacó el alcalde Camilo
        Benavente.
        Este ciclo de formación incluyó este año seis sesiones, una vez al mes, y se centró en me-
        todologías de enseñanza del piano dictadas por el pianista Sebastián Arredondo.
        “El museo siempre ha estado comprometido con el deseo de ayudar, no solo preservando
        el legado del maestro Arrau, sino también brindando instrucción constante a cada niño de la
        comuna interesado y motivado a seguir los pasos del destacado pianista chillanejo”, afirmó
        el director municipal de Cultura, Artes y Patrimonio, Eduardo Peña.
        La coordinadora del proyecto, Deysi Miranda, dijo: “ellos han estado muy motivados al ver
        sus logros, lo que los impulsa a creer que son capaces de lograr mucho más. Desde nuestra
        parte, también quisiéramos disponer de más tiempo para dedicarles a cada uno, y así disfrutar
        más de sus avances en la parte técnica. Es importante enseñarles cómo abordar una obra y
        cómo llegar al punto que el compositor quiso transmitir cuando escribió la pieza”.
        El proyecto “Lecciones de Piano en la Casa Arrau”, financiado con recursos del municipio,
        contempla la clase magistral final está programada para el 5 de diciembre en la gran sala
        del Teatro Municipal de Chillán.
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