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30   Domingo 23 de junio de 2024                                                                                             www.ladiscusion.cl

           Cultura







           Espectro Completo: Reflexiones en Blanco









                     ace poco tiempo, me                               el abismo entre dos mundos: uno,   Así, el invierno se revela no solo como
                     encontré con un texto del                         inundado de luz artificial y calor de   una estación del año, sino como un
                     insigne escritor chileno,                         ofertas comerciales; el otro, sumergido   estado del ser, donde los colores fríos
                     Pedro Lemebel. Lo cono-                           en la penumbra y el olvido.   construyen un imaginario colectivo
           Hcía previamente pero no                                      Lemebel, en su lírica poética, no   lleno de introspección y resonancia
           le había dado la atención necesaria.   Así, el blanco se con-  solo denuncia esta dicotomía, sino   emocional. En este paisaje dominado
           Esta desatención fue más bien por                           que la transforma en un lienzo de   por el blanco, cada matiz es un poema,
           su título, “Zanjón de la Aguada”. Mi  vierte en más que un   resistencia. Sus palabras son un   cada sombra una historia, cada luz
           justificación es que desde hace un                          abrazo para aquellos que el invierno ha   tenue una promesa de la primavera
           tiempo he dejado de lado la atención   color; es un estado de   dejado atrás, un recordatorio de que,   que aún duerme bajo la nieve.
           literaria por escritos capitalinos, más   ser, un refugio de paz   en cada gota de lluvia, en cada rincón   El color blanco, en su esencia física,
           aún cuando su prosa y su texto me eran                      inundado del zanjón, hay historias   es la suma de todos los colores del
           tan evidentes, no obstante, leerlo fue   interna, un espejo que   que, aunque ignoradas, persisten en   espectro de luz visible, unidos en
           un golpe ontológico a mi visión del                         su lucha por ser contadas. Y así, en   una sinfonía de claridad luminosa.
           sufrimiento, aunque más bien lo defi-  refleja lo que el alma   medio del frío despiadado, la voz de   Es el reflejo total de la luz, la ausencia
           niría como un acto de comprobación,                         Lemebel se alza, cálida y desafiante,   de absorción, una página en blanco
           ya que en este sur amado (Ñuble y el   desea ver. En su inmen-  una llama en la tormenta.  sobre la cual el universo puede pintar
           Biobío) se sufre igual y peor.  sidad silente, el blanco      Cuando el invierno despliega su   sin restricciones. Científicamente, el
             En este texto, “Zanjón de la Aguada”,                     paleta sobre el lienzo de la ciudad, los   blanco es pureza óptica; no es un color
           Pedro Lemebel teje las historias de   guarda el secreto del   colores fríos toman el mando, tejiendo   en sí, sino la amalgama de todos, un
           los olvidados, aquellos cuyas vidas                         un tapiz de sensaciones que trascien-  prisma invertido que devuelve a los   Alejandro Arros Aravena
           se deslizan como sombras bajo el gris  todo y la nada, invitán-  den la vista para anidar en el alma. El   ojos toda luz que toca.  Doctor en Educación, Académico
           plomizo del cielo santiaguino. Con la                       blanco, en su pureza inmaculada, se   Poéticamente, el blanco es el silencio   Departamento de Comunicación
           llegada del invierno, el zanjón se trans-  donos a encontrar en su   convierte en el protagonista de esta   antes de la nota, el suspiro de la nieve   Visual UBB
           forma; las aguas frías y torrenciales   claridad la esencia mis-  estación, no solo cubriendo el paisaje   que cae suavemente en un bosque
           lo recorren, arrastrando consigo las                        con su manto de nieve, sino también   adormecido. Es el lienzo infinito de
           historias de abandono y desolación.   ma del ser y del sentir”  llenando el aire con un silencio pro-  posibilidades, la promesa de comienzos
           Lemebel captura este momento con                            fundo y resonante.            y la paz de los finales. En él, habita
           una sensibilidad que traspasa el mero                         Este color, tan frío y distante, evoca   la quietud de los albores, el primer
           frío del clima para adentrarse en el                        una serenidad melancólica, un retiro   aliento del amanecer que rompe el
           frío del alma humana.                                       hacia el interior donde el calor de los   dominio de la oscuridad con un suave
             Mientras las gotas de lluvia tambori-                     recuerdos y la intimidad del pensa-  despliegue de luz.
           lean sobre los techos de zinc -común-                       miento proporcionan refugio contra   Este color, tan lleno y vacío a la vez,
           mente llamadas “fonolas”-, las pantallas                    la crudeza del exterior. Junto a él, los   narra el ciclo eterno de la vida y la
           de televisión en las casas acomodadas                       grises perla de las nubes cargadas y el   muerte, de lo que está por venir y lo
           parpadean con ofertas de electrodo-                         azul pálido del cielo invernal completan   que fue dejado atrás. Es la túnica de los
           mésticos y escaparates de moda, en un                       esta escena introspectiva. Son colores   ángeles y el luto de los desconsolados,
           estridente contraste con la realidad del                    que no solo se ven, sino que se sienten:   la dualidad de la celebración y el lamen-
           zanjón. En este escenario, Lemebel nos                      el gris de las tardes sin fin, el azul del   to. El blanco evoca una tranquilidad
           invita a mirar más allá de la banalidad                     frío que penetra los huesos.  profunda, un refugio para el espíritu
           de las noticias que pasan de largo las                        En este mundo invernal que recién   cansado y un campo de juego para la
           verdaderas tormentas humanas que                            comenzamos, reducido a esquemas de   imaginación desbordante.
           acontecen en los márgenes.                                  fríos y blancos, cada color adquiere un   Así, el blanco se convierte en más
             El autor dibuja con sus palabras los                      peso emocional, narrando historias de   que un color; es un estado de ser, un
           rostros curtidos por el frío, las manos                     soledad compartida y quietud reflexiva.   refugio de paz interna, un espejo que
           entumecidas que se extienden implo-                         El invierno, con su paleta limitada pero   refleja lo que el alma desea ver. En su
           rando algo más que limosna: buscan                          poderosa, invita a una contemplación   inmensidad silente, el blanco guarda el
           calor, comprensión, un reconocimiento                       más profunda, donde cada tono frío es   secreto del todo y la nada, invitándonos
           de su existencia. La lluvia, implacable                     un susurro en el viento, un recuerdo   a encontrar en su claridad la esencia
           y fría, no hace más que profundizar                         que flota en el aire gélido.  misma del ser y del sentir.



           30 grabados originales del


           Museo de la Gráfica de Chillán


           están siendo expuestos


           en Dresden, Alemania




           30 grabados originales y material documental impreso de la colección itinerante del Museo Internacional de la Gráfica
           de Chillán y documentación de artistas alemanes y latinoamericanos se exhiben en la Galería Lebensräme “Arte a
           Orillas del Río Elba”, de la ciudad de Dresden, Alemania.
           La exposición se inauguró el 8 de junio y permanecerá abierta hasta el 21 de julio. Tiene por título “Fuerza Permanen-
           te del Expresionismo” y conlleva un homenaje a los artistas del “Grupo Brücke” (Grupo Puente), que desde Dresden
           revolucionaron la gráfica y la pintura desde 1905, expandiendo sus influencias a otras ciudades alemanas, centro de
           Europa, Latinoamérica y Estados Unidos.
           Hernando León explica, desde Alemania, que “en la exhibición se puede observar como los planteamientos estéticos
           sociales de Los Maestros de inicios del siglo 20, aún permanecen vivos en las obras de varios jóvenes artistas tanto en
           Alemania como en otras partes del mundo en las obras originales que se encuentran presentes en esta exposición”.
           La exposición cuenta con una parte documental, fotografías de obras de los iniciadores de este movimiento, entre
           estos: Erich Heckel, “Fränzi – Modelo”, 1910 (xilografía); Otto Dix, “Leonie”, 1923 (litografía) y Schmidt-Rottluff, “Mujer
           en el Bosque” 1919 (xilografía). La otra parte está compuesta por obras originales de artistas contemporáneos, como
           Angela Hampel, “Dos en Perfil” 1986 (serigrafía); Sigfried Schade, “Rostro” 1964 (tintas); Leonore Adler, “Hoja de Calen-
           dario” (algrafía). Además, se cuenta con artistas invitados, entre estos: Guillermo Núñez, Guillermo Deisler, el propio
           Hernando León y Manuel Escobar. Con esta exposición, se continúa la línea itinerante del Museo Internacional de la
           Gráfica de Chillán, contribuyendo así a las relaciones culturales entre los países.
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