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Personajes
“El Valdiviano” de la suerte que
vendió 15 veces el premio gordo
POR: FELIPE AHUMADA JEGÓ*[email protected] / FOTO: CRISTIAN CÁCERES HERMOSILLA e llama Gabriel Urrutia Inostroza y que llegaba a Chillán. Y premios menores y
tiene 68 años. Pese a que vive en Chillán medianos también le dieron más reputación de
hace 60 exactos años y su cara le es “hombre de fortuna”.
Antes, el kiosco de 5 de Abril, familiar a muchos, nadie lo conoce por “Una vez don Constantino Zarzar, el papá de
SGabriel. “Nooo, nadie, a mí todos me don Sergio (alcalde de Chillán), me compró un
estaba frente al cine Central. ubican por “El valdiviano”, así me dicen desde boleto y se ganó un auto”, comenta.
Allí trabajaba una persona que siempre”, comenta. Dice la leyenda -que él mismo confi rma- que
Y adivine qué: “nací en Valparaíso y no tengo la fe que los chillanejos le tenían a sus boletos
ponía las cintas, el “cojo”. Una vez me nada que ver con Valdivia”, confi esa. era tal que nunca se quedó con ninguno para
compró un boleto de Lotería y se ganó Lo que pasa es que este famoso kiosquero, quien devolver por no haberlos vendido. Y eso ocurría
ha vendido 15 veces el premio gordo de la Lotería, solo en las semanas en que dejaba atendiendo a
$40 millones, con los que educó a sus Polla, Tincazo y el Kino, quedó huérfano a los 8 alguna otra persona el kiosco. Porque la suerte
años y se vino con sus hermanos a vivir a Chillán, no acepta alternativas y si no era él, la cosa no
hijos y cambió su vida. Pero la mayoría, donde le quedaban algunos familiares. era, no más.
no todos claro, se gastan todo lo que Fue en 1964 que comenzó a trabajar en el kiosco “Yo nunca me gané nada y eso que a veces
de don Carlos Mora, oriundo de Valdivia y quien me dejo algunos boletos para mí”, dice y ya
ganaron en poco tiempo y después me le puso a su local “El Valdiviano”. nada sorprende después de saber que no es ni
iban a contar que lo perdieron todo. Así Sin embargo, dos años después falleció el dueño de Valdivia. “Pero formé una linda familia, vivo
original y Gabriel Urrutia se quedó con el kiosco con una hija, su pareja y mi nieto y ahora tengo,
es la suerte”. y con el apodo. Para siempre. además, un local en el terminal La Merced. Soy
Su fama comenzó a crecer con cada millón un hombre de suerte”.