Page 31 - Diario 01/12/2024

www.ladiscusion.cl Domingo 1º de diciembre de 2024 31

Cultura

El silencio del ruido digital.

Recuperar la conversación real

En la era de las pantallas, nuestras de esa sensibilidad hoy? carlo más tarde? Podemos aprender
palabras parecen haber perdido su El problema no es la tecnología en sí, de las prácticas de las generaciones
peso. La comunicación instantánea sino cómo la usamos. Nicholas Carr, anteriores, que veían en la mesa fami-
que nos prometió cercanía se ha en su libro The Shallows, argumenta liar o en las reuniones de amigos un
convertido en un laberinto de frases que nuestras mentes están siendo ritual sagrado. En lugar de compartir
apresuradas, emojis y audios que más La solución no es aban- reconfiguradas por el uso constante memes, compartían historias; en lugar
que dialogar, llenan espacios vacíos. de herramientas digitales. Al acostum- de emojis, compartían risas genuinas.
Vivimos en un mundo donde el ruido donar la tecnología, sino brarnos a las interrupciones, perdemos Incluso algo tan sencillo como leer
digital se confunde con conexión, y las la capacidad de concentrarnos, lo que juntos en voz alta o jugar a un juego
conversaciones profundas han sido equilibrarla con prácticas afecta no solo nuestro pensamiento, de mesa puede convertirse en un acto
relegadas a una lista de prioridades que valoren lo analógico. sino también nuestras interacciones de conexión.
eternamente postergadas. Sherry sociales. Una conversación profunda La solución no es abandonar la
Turkle, en su libro Alone Together, Un club de lectura, por requiere tiempo, paciencia y, sobre tecnología, sino equilibrarla con
nos advierte que la tecnología nos todo, la disposición de entrar en el prácticas que valoren lo analógico.
ofrece la ilusión de compañía sin las ejemplo, puede ser una mundo del otro sin apuros. ¿Cómo Un club de lectura, por ejemplo,
demandas de la intimidad. En las podemos recuperar este espacio en un puede ser una forma de reintroducir
pantallas, siempre hay tiempo para forma de reintroducir contexto donde todo parece diseñado el diálogo pausado en nuestras vidas.
editar, borrar y rehacer, pero esta el diálogo pausado en para distraernos? En estos espacios, los lectores no solo
constante manipulación del lenguaje El silencio, temido y evitado en nues- comparten sus interpretaciones, sino
nos aleja de la espontaneidad que nuestras vidas. En estos tras vidas digitales, es fundamental que también aprenden a escuchar las
define las interacciones humanas. para cualquier diálogo significativo. perspectivas de otros. En términos Alejandro Arros Aravena
En WhatsApp, por ejemplo, las con- espacios, los lectores Como señala Turkle, “es en el silencio visuales, podríamos pensar en las Doctor en Educación, Académico
versaciones familiares o laborales se donde nos encontramos a nosotros cartas, ese arte en extinción que exigía Departamento de Comunicación
reducen a un intercambio pragmático no solo comparten sus mismos”. Sin embargo, el silencio tiempo, dedicación y reflexión. Cada Visual UBB
de información: mensajes sobre quién interpretaciones, sino se ha convertido en algo incómodo. palabra escrita a mano llevaba el peso
recoge a los niños, recordatorios de Una pausa en un chat se percibe como de las emociones del remitente, algo paradójicamente, estamos perdiendo
reuniones o memes que intentan que también aprenden indiferencia; una falta de respuesta que ningún mensaje de WhatsApp en nuestra obsesión por lo digital.
disimular el vacío. inmediata genera ansiedad. En el puede replicar. Escribir una carta La película Her de Spike Jonze es
Mientras tanto, lo esencial, la pausa a escuchar las perspec- mundo físico, el silencio en una hoy, incluso como un gesto simbólico, una advertencia y una lección. En ella,
para escuchar y el silencio que precede conversación puede ser un espacio de podría ser un acto de resistencia contra el protagonista se enamora de una
a una respuesta genuina, queda aho- tivas de otros. En térmi- reflexión compartida, un momento la fugacidad de lo digital.No se trata de inteligencia artificial, encontrando en
gado por el afán de inmediatez. Hemos nos visuales, podríamos para asimilar lo dicho y permitir que idealizar el pasado, sino de cuestionar su voz algo que le falta en sus interac-
olvidado que la comunicación no es emerja lo no dicho. Recuerdo un paseo nuestras prácticas presentes. ¿Qué ciones humanas: atención genuina.
solo palabras; es el tono, la mirada, el pensar en las cartas, ese reciente por el parque con un amigo podemos hacer, como individuos y Sin embargo, al final, comprende
gesto. En las pantallas, estas dimen- que, a diferencia de las interacciones como sociedad, para recuperar el que esta conexión es una ilusión, un
siones desaparecen, dejando apenas arte en extinción que exi- digitales, no tuvo prisa por llenar cada significado en nuestras interacciones? reflejo de su propia soledad. En un giro
sombras de lo que significa hablar y momento con palabras. Caminamos en Quizás comience con algo tan sencillo conmovedor, regresa a las relaciones
ser escuchado. La conversación real, gía tiempo, dedicación y silencio entre árboles, compartiendo como escuchar. Escuchar de verdad, humanas, con todas sus imperfeccio-
aquella que nos transforma, parece reflexión. Cada palabra un entendimiento tácito. Ese simple sin la urgencia de responder, sin la nes y complejidades. Al igual que en
haberse convertido en un arte perdido. acto me recordó lo que se pierde distracción de una pantalla. Como Her, el futuro de nuestra comunica-
Imagino, por contraste, las tardes escrita a mano llevaba cuando todo se reduce a mensajes Turkle sugiere, “el mayor regalo que ción depende de cómo definimos la
de café que se retratan en películas de texto. podemos dar a alguien es nuestra calidad de nuestras interacciones.
como Midnight in Paris de Woody el peso de las emocio- Para recuperar el arte de la con- atención”. En la era de las inteligencias, Podemos seguir llenando nuestras
Allen. En la película, los personajes versación, necesitamos cultivar la donde incluso los algoritmos pueden vidas con ruido digital o aprender a
se sumergen en diálogos cargados de nes del remitente, algo presencia. Esto implica no solo apa- simular una conversación, el desafío es valorar los silencios compartidos, las
ideas, emociones y silencios signifi- que ningún mensaje de gar las notificaciones, sino también recordar lo que significa ser humano. palabras pensadas y los momentos en
cativos. En una época ficticia donde resistir el impulso de dividir nuestra Los diálogos reales, aquellos que nos que nuestras voces se encuentran sin
Hemingway y Fitzgerald compartían WhatsApp puede replicar. atención. ¿Cuándo fue la última vez transforman, requieren más que datos; intermediarios. Recuperar el arte de
copas, cada palabra tenía un propósi- que tuvimos una conversación sin requieren vulnerabilidad, empatía y la conversación no es solo un acto de
to, cada pausa sugería un abismo de mirar un teléfono? ¿Sin la necesidad tiempo. Estas son las cualidades que nostalgia; es una forma de resistir la
significado. ¿Qué tan lejos estamos de capturar el momento para publi- las máquinas no pueden replicar y que, deshumanización de nuestra era.

Jóvenes pianistas de Ñuble rindieron homenaje a

Claudio Arrau recordando su última visita a Chile

Estudiantes de piano de la región rindieron homenaje al gran maestro Claudio Arrau
en un recital realizado en el Teatro Municipal, evento organizado por el Museo Claudio
Arrau de la Dirección de Cultura, Artes y Patrimonio. El encuentro permitió fomentar
el estudio y la práctica del piano, destacando a los talentos emergentes de la música
clásica y conmemorando la última visita de Arrau a la ciudad en 1984.
“Queremos seguir promoviendo el talento juvenil y dando visibilidad a la música en
nuestra región”, destacó Eduardo Peña, director subrogante de Cultura, quien destacó
la importancia de apoyar este tipo de iniciativas para el desarrollo cultural local.
La actividad forma parte de un proyecto impulsado por el Museo Arrau, que desde 2021
ha organizado siete conciertos con la participación de más de 120 jóvenes pianistas
de la región de Ñuble. Este esfuerzo busca acercar a los estudiantes al escenario más
importante de la región, fortaleciendo su confianza y habilidades al presentarse ante
un público.
En el mismo sentido, el alcalde Camilo Benavente expresó su satisfacción por el éxito
del evento y por el esfuerzo constante del municipio en apoyar a los jóvenes músicos.
“Este tipo de iniciativas son fundamentales para seguir nutriendo la cultura de nuestra
ciudad y región. Felicitamos a los estudiantes por su dedicación y a las instituciones que
han apoyado este proyecto”, comentó Benavente, quien reafirmó el compromiso de la
administración municipal con el impulso de la música y las artes en la región.
El evento reunió a jóvenes pianistas de entre 6 y 18 años y provenientes de las comunas
de San Carlos, Coihueco, Coelemu, El Carmen, Ránquil (Ñipas) y Chillán, quienes han
sido formados bajo la tutela de destacados profesores de piano.