Page 27 - 22/08/2021

www.ladiscusion.cl
Cultura&Espectáculos
La huacha o la mestiza abusada
por los talibanes chilenos
enía el rol de “empleada para todo
servicio”. Aquella niña de la cocinera
y de del patrón (o bien de su hijo), no
merecía sueldo, horarios laborales ni
Tmenos respeto por su cuerpo. Porque
la corporeidad de las hijas de los inquilinos de
la hacienda patronal chilena, las vinculaba a
múltiples experiencias de abuso. Porque hasta
hace unos cincuenta años, socialmente se le
atribuía a los cuerpos femeninos nacidos en
el campo, el ser objeto de goce del hombre y
como una forma de propiedad privada. Eran
para el uso, una subordinación imperante en
la mentalidad rural patriarcal. La violencia
sexual del patrón contra ésta, generalmente
quedaba impune debido a la insignificancia
social que se le otorgaba. Esta violencia se
presentaba en situaciones donde la niña o
joven tenía el rol de sirvienta en el contexto de
familias trabajadoras de los hacendados. Pero
además, la huacha se encontraba en el abuso
sexual proveniente de sus propios hogares,
esa otra vulnerabilidad mayor a la que se veía
expuesta en relación con sus hermanos varones.
Debido a aquella servil condición, “la moral
de las señoritas es la moral de las prostitutas
porque las prostituyen sus patrones. Las hem-
bras –decía de Rokha- viven como perras y no
son perras, son vírgenes pisoteadas, violadas
en los potreros, como yeguas, y abandonadas
con el hijo hambriento entre los pechos; caen
más tarde vencidas…”
Una vez con un crío entre los brazos, siem-
pre de allegada en la cada vez más estrecha
casa que ocupaban sus padres inquilinos,
su camino eran la cocina y el destripe de las
aves, el arroyo adonde debía r a diario a lavar
cientos de piezas de ropa, el galpón abierto
para escarmenar la lana o el corral como
ordeñadora de las vacas. En las actividades
y oficios que desempeñaban niños huachos
y niñas huachas también es posible notar
importantes diferencias. Mientras los huachos temporeras ), pero además continuaban trabajando
podían optar por el trabajo libre en los cam-
pos como gañanes, el trabajo en minas como en las tareas hogareñas, padeciendo la llamada “doble
matasapos o –ya en el siglo XX– en trabajos
industriales, la gama de opciones de la huacha jornada laboral”. Allí enfrentaban la enfermedad de los
era más reducida. Recién en el siglo XX se le
abren posibilidades para el trabajo industrial, niños y el alcoholismo nocturno del hombre.
Domingo 22 de agosto de 2021 27
Ziley Mora Penrose. Escritor, etnógrafo y filósofo
trabajos tradicionalmente desempeñados por
hombres. Por lo que la opción más segura era
aquella que tenía relación con el rol social
asignado a la mujer: el trabajo doméstico, el
cual se efectuaba en casas señoriales, surgien-
do de ello la figura de la china, la cual vivía
en permanente violencia sexual y física, tal
como plantea Toro y Muñoz: “La mayoría de
las sirvientas o criadas fueron maltratadas (a
menudo violadas) por sus amos en las ‘casas
de honor’ donde trabajaban”.
Por otro lado, el trabajo del huacho con la
huacha también se diferencia con lo relacionado
al trabajo del propio hogar. Mientras el huacho
trabajaba largas jornadas para contribuir a sí
mismo o al sustento familiar, las huachas ge-
neralmente trabajaban estas mismas horas (ya
sea en las fábricas, de costureras, lavanderas,
temporeras o prostitutas), pero además con-
tinuaban trabajando en las tareas hogareñas,
padeciendo la llamada “doble jornada laboral”.
Allí enfrentaban la enfermedad de los niños y
el alcoholismo nocturno del hombre. Rosaria
Araya, una joven campesina pobre y soltera,
la cual, luego de parir cuatro hijos (un varón
y tres mujeres), muere a causa de los dolores
y la desesperación por no tener los medios
para mantenerlos. Este drama tan repetido y
que narra como prototipo el historiador G.
Salazar, dice que el varón es inmediatamente
adoptado por una familia por caridad, mien-
tras que sus otras tres hermanas son criadas
en la escasez por su abuela y vecinas. Esta
marginación que las niñas sufren desde su más
tierna infancia, trae como consecuencia utilizar
su abandono para generar recursos. Es decir,
Las huachas generalmente trabajaban desempeñarse en el oficio de la prostitución
y la trata de blancas. En 1920, el 80 % de las
estas mismas horas (ya sea en las prostitutas provenían de un hogar incompleto o
deshecho; y más del 60% de ellas habían tenido
fábricas, de costureras, lavanderas, su primera relación sexual entre los 12 y los
16 años, la cual presuntamente puede haber
ocurrido bajo forma de estupro o incesto,
perpetrado por los hombres convivientes de
las habitaciones insalubres y hacinadas donde
pasaron su niñez. Así, la historia de Chile
generó sus talibanes pero sin la fe del Profeta
y ni siquiera la burka que tapara en algo la
vergüenza de sus hijas huachas.
RetroDiario
20/08/1960 Chacal de Nahueltoro camino al patíbulo. El sacerdote
Nace la leyenda del
desde la detención de Valen-
“El 20 de agosto Jorge del
zuela, se concretó su condena
permaneció junto al homicida
Carmen Valenzuela Torres se
acercó hasta su conviviente Rosa
a muerte por fusilamiento. LA
mientras el comandante Layera
hacía con la mano derecha una
Rivas, en busca de la pensión
DISCUSIÓN dio testimonio
leve seña para que el capitán Iván
de esos acontecimientos de
de viudez que la mujer debía
retirar cada mes en San Carlos.
viento crujiente acompañado
Rosa venía llegando sin ningún
los ocho hombres del pelotón de
de gruesa lluvia que seis horas
peso en los bolsillos puesto que
fusilamiento. Estos avanzaron
un trámite burocrático le había
antes soplaba en la ciudad, a
evitando hasta el más pequeño
impedido retirar el dinero. la siguiente manera: “Tras un Sepúlveda entrara a la cárcel con
ruido y se instalaron dando la
las 07.21 justas de la mañana
Frente a esta situación Valen- expiró en el banquillo Jorge del espalda al mar y a unos cinco
zuela reaccionó violentamente Carmen Valenzuela Torres, el metros del banquillo. Los cuatro
y tomando la guadaña, con la gañán de 23 años de edad que de adelante estaban hincados y
que usualmente trabajaba, le dio el atardecer del 20 de agosto de los otros cuatro se mantuvieron
muerte. Luego hizo lo mismo 1960 se transformó en seis veces de pie. A otra señal previa con-
con los cinco hijos de la mujer”. asesino. A las 05.20 de la mañana venida, el capellán comenzó a
Este es el relato que dos años se puso frente a una mesa y hasta retirarse del banquillo, junto al
antes de la ejecución de Jorge las 05.40, escribió serenamente. comandante Layera. El primero
del Carmen Valenzuela Torres, Se trataba de una extensa carta elevó el tono de su voz, para
más conocido como “El Chacal dedicada al alcaide y personal de simular que seguía rezando
de Nahueltoro”, publicó LA la cárcel a quienes agradecía las al lado del ajusticiado. En ese
DISCUSIÓN acerca del crimen atenciones recibidas. Las cáma- instante, el capitán Sepúlveda,
que cometió el hombre. ras fotográficas funcionaban sin apenas levantó la espada. Eran
Tras dos años y siete meses cesar, siguiendo paso a paso el las 07.21 horas”.