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LA DISCUSIÓN

pero no soy buena actriz. Mis hijas actuaban
y me di cuenta de la cantidad de trabajo que
es poner en marcha la obra de teatro en el
colegio y que la puesta en escena necesita-
ba ayuda… hablé con la profesora y empecé
a trabajar con los disfraces, con muy poco
presupuesto, pero con esfuerzo para que
saliera bonita, con géneros baratos de saldo.
Me preocupo mucho del vestuario del coro,
de darle la misma importancia a todos”.
Va abriendo puertas y aparece más vestuario.
“No gano ni uno, es todo por la buena onda”,
explica. Trabaja, piensa, reduce, invierte no
solo tiempo y dinero sino que mucho cari-
ño. “Me da la oportunidad de conocer a los
niños, me encanta”.
Su casa tiene mucho de eso mismo. “Me
gusta ir de a poco decorando, dándole un
sentido… no que todo sea tan fácil, pagarlo
y listo, eso no es mi estilo. Estoy esperando
mi lámpara del living, hasta que la encuen-
tre, ojalá de una herencia o en algún rema-
te”, concluye.

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En el quincho, el refrigerador rojo antiguo lo compró
en un remate.

2 Una amiga ya no quería la pesa antigua. Le pagó algo
por ella y la puso sobre un antiguo baúl restaurado.

Las sillas y el comedor las encontró en una subasta.
3 Eran de otro color y las lijó. “En mi casa no me creían,
pero lo logré y son las que usamos hoy”.

4 En un remate realmente barato encontró el bar del
comedor.
4 5 5 Las puertas antiguas se las regaló un amigo. Eran de

una casa de campo que se cayó con el terremoto.
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