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Cultura&Espectáculos
Enseñanzas perdidas de las
antiguas abuelas
“Así como llevar un escapulario con hojitas
de ruda libra de la ataques de epilepsia y de
los ataques de los demonios invisibles, a los
niños hay que colgarles al cuello un colmillo de
perro para que les salgan más fácil los dientes.
Pero antes, hacerles un escapulario de lana
roja con de pelos de perro negro (de perra, si
es varón el niño) porque si no los hechizarán
con la fuerza del mal de ojo. Es que la esencia
del perro guardián custodiará sus almitas
aquí y en el Más Allá cuando adultos”. Así
me lo aconsejaban unas abuelas de Coihueco,
allá por los años del 1980, información que
publiqué en mi primer libro.
El amuleto es para librar del mal. Es pro-
tección para el alma y el cuerpo, pero fun-
damentalmente para el doble etérico donde
se cuajan primero las enfermedades. Portar
un objeto de plata o en su defecto, cualquier
objeto de acero (un cortaplumas “cargado” o
magnetizado en el bolsillo ayuda), representa
una coraza frente a las fuerzas negativas de la
hechicería y el mal. Es una excelente “contra”
para protegerse de los flechazos sutiles de
los brujos.
Crea un escudo para cualquier envidia,
mal de ojo o maleficio que alguien pueda
haber lanzado sobre el portador. Cuida de
las malas intenciones y de los malos deseos
de otros hacia la personas.
A diferencia del amuleto, “el talismán sirve
para lograr lo que se quiere”, me decían. Por
eso no debe comprar, dado que requiere de la
intención consciente en cada elemento puesto
allí. Es de autoconstrucción: mientras más
energía desplazada en su confección por lo
costoso de algún elemento, más poderoso es.
Además protege de las influencias negativas
del entorno, sirviendo como un repelente de
malas vibraciones. Por otro lado su energía
da un empujón muy grande en el aumento de
la autoconfianza, por lo que probablemente
la persona reflejará una elevada autoestima de la intención consciente en cada elemento
y seguridad a todos los que le rodean.
“No es bueno dormir con la boca abierta puesto allí. Es de autoconstrucción: mientras
porque el diablo puede fácilmente apoderarse
del alma”, decían aquellas viejas. Pasa lo mis- más energía desplazada en su confección por lo
mo con el Colocolo, un gallo-ratoncillo de la
cultura mapuche, origen de toda la cultura costoso de algún elemento, más poderoso es”.
09/08/1897
Domingo 8 de agosto de 2021 29
Ziley Mora Penrose. Escritor, etnógrafo y filósofo
rural de Chile, uno que grita en las noches
bajo el piso de la casa y chupa la saliva de sus
moradores. Si se siente el golpeteo insistente y
su grito bajo el piso de la casa y al golpeársele
éste el ruido se corre, está anunciando muerte,
ruina, enfermedad o mala suerte. Frente al
presagio del Colo-Colo, debe recurrirse a
un exorcismo con oración y agua bendita.
Así lo prescribe la usanza tradicional. Tie-
ne el fatal poder de hacer que enferme de
muerte la persona cuya saliva bebe (soltar la
mandíbula durante el sueño) o cuyas sobras
come. Al respecto, en la tradición mapuche
existe el küllmaturalife, especie de duende
habitante de la tierra de abajo que, cuando
ve negligencia en casa, sube en la noche a
lamer los platos que quedaron con restos de
comida y restos de saliva.
El Colo-Colo es un tipo de lagarto-dragón,
con las dimensiones de una culebra-vampiro,
siempre al acecho de los lugares donde reina
lo bajo y pasional. En otras zonas a este reptil
se le conoce como el Piwichen, una arcaica
serpiente alada o “dragón”, que grita en la noche,
vampiriza la sangre de los humanos y les roba
la energía durante el sueño. En Coihueco, se
le recordaba como a un culebrón que devora
las ovejas, principalmente las negras, por las
que muestra particular predilección. Cuando
alguien enloquece, decían, es porque lo cogió
un remolino en el campo que le revolvió el
pensamiento.
La saliva es el símbolo de la individualidad y
la autonomía, la misma que borraría de cuajo
el dragón alado de la moderna 5G. Porque
hoy son otros los vampiros y en nada astrales
“El talismán sirve para lograr lo que que nos quitan la salud mental. Y vienen de
la tecnología: dejar encendido un teléfono
se quiere”, me decían. Por eso no celular en la noche, trastorna el cerebro,
provoca insomnio, estrés, chupando el resto
debe comprar, dado que requiere de la poca energía que le queda a la persona.
Porque antes, durante el día, ésta ya le ha
entregado toda la información que el Piwi-
chen y el Colo-Colo cibernético de la Matrix
global requerían. Además de la voluntad y la
capacidad de razonar por su propia cuenta.
Por eso es que ya no quedan ovejas negras
rebeldes que nunca dejan restos de su comida
digital en sus platos nocturnos.
RetroDiario
Nace la escritora Marta
Brunet Caraves
Hace 122 años nació Marta la Biblioteca Nacional de Chile. ‘Ratos Ilustrados’ y en la pá-
Brunet en Chillán, frente al mer- Luego, de regreso a su país en la gina literaria dominical de ‘La
cado, en la calle 5 de Abril. Na- década del cincuenta, donó gran Discusión’, el también añoso
rradora, autora de una veintena parte de su biblioteca personal diario, abierto generosamente
de libros entre novelas y cuentos al Liceo, sumándole algunas a nuestros escarceos, tanto
que le valieron la obtención del fotografías y cuadros. que hasta nos pagaban. Sí, me
pagaban la astronómica suma
Brunet reafirma el compro-
Premio Nacional de Literatura
Bombal. cuales se remontan precisamente escritora en su carta.
en el año 1961. Mujer ícono
miso que siempre demostró
de quince pesos por cuento,
para con su ciudad natal desde
de las letras chilenas, junto a
hecho, que me llenaba de un
sus inicios como escritora, los
recóndito orgullo”, recordó la
Gabriela Mistral y María Luisa
a LA DISCUSIÓN, matutino
Marta Brunet dejó un legado
Al alumno imaginario le
en vida tanto a su ciudad natal,
en el que le pagaban la suma
cuenta también cómo era la vida
de 15 pesos por escribir bajo el
tierra amada por ella, como a la
literaria en la ciudad, cuando
Universidad de Chile, donde
seudónimo de Miriam.
ella era una adolescente. Habla
fue profesora en las Escuelas de
Una de sus misivas se titula
de los amigos de letras que dejó
“Carta a un alumno del Liceo de
Temporada entre 1953 y 1962.
en Chillán y de la creación de
A Chillán, durante su estadía
Chillán” y en ella están conteni-
un centro literario del cual no
de 14 años en Buenos Aires,
mientras trabajó como cónsul
la ciudad, recordando incluso su
habla de los primeros encuentros
con Neruda y de la fascinación
paso por LA DISCUSIÓN.
en la embajada chilena en ese
que le entregaba la idea de
país, envió libros al Liceo de
“Escribía yo a la par que la
Niñas de la capital de Ñuble y a dos varios pasajes de Brunet en recuerda el nombre. También
escribir para ser leída.
muchachada. Publicaba: en