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28   Domingo 18 de mayo de 2025                                                                                              www.ladiscusion.cl

           Cultura






           La canción del elegido: somos el otro, la luz infinita




                                           En medio de las distracciones de la                                                     de cambiar el guión de nuestra vida y
                                         vida, esa ilusionista callejera, muy pocos                                                de reinventarnos por identificarnos
                                         se dan cuenta que viven encerrados en                                                     con solo     el programa animal, esa
                                         una cárcel, soportando una desoladora                                                     plataforma básica –pero en nada
                                         e intrincada cadena perpetua, senten-                                                     suficiente- de operación en el mundo.
                                         cia dictada por el invisible juez de sí   Es asombroso lo poco que sabemos de nuestro “yo”, de las   Es mas seguro retornar a las antiguas
                                         mismos. Prisioneros de tantas cosas,   infinitas posibilidades que se esconden en nuestra iden-  andanzas gregarias que explorar el
                                         sobretodo mentales y emocionales,                                                         incierto sendero que nos colocaría en
                                         nos olvidamos a cada rato que más que   tidad, esperándonos para realizarse. Y éstas nunca llegan   un desacostumbrado horizonte. Como
                                         organismo viviente con necesidades   a la expresión vital ni a su genuina realización al confor-  un agujero negro, instalado en el centro
                                         de consumo, somos luz, que nuestra                                                        de nuestro pequeño cosmos cerebral, al
                                         verdadera historia corresponde a una   marnos con ser    lo que ya somos. Generalmente fracasa-  final, resultamos tragados por la velo-
                                         antigua historia de libertad: la propia   mos en el intento de cambiar el guión de nuestra vida.  cidad de nuestro supuesto “propio yo”.
                                         de un “animal de galaxias”. Y como muy                                                    Ese centro magnético, sería la réplica a
                                         bien nos lo recuerda Silvio Rodríguez                                                     escala    humana del Gran Hoyo que lleva
                                         en su preciosa Canción del Elegido,                                                       a la muerte, a la disolución y a la nada
                                         “es una historia que tiene que ver con                                                    todo vestigio de luz o de consciencia. Se
                                         el curso de la Vía Láctea” y con el Infi-                                                 trataría del antiguo espíritu del “Mal”,
                                         nito universo. La de nuestra auténtica                                                    es decir,    la fuerza involutiva que todo
                                         identidad, es una historia cósmica                                                        lo engulle y que nos degrada    y rebaja
           Ziley Mora Penrose            enterrada por olvido del Ser que somos,                                                   más allá incluso de la condición de
           Escritor, etnógrafo y filósofo  el que en esencia se identifica con la                                                  dispersa materia inorgánica.
                                         Luz. Y permanece enterrada porque                                                          Pero nosotros somos más bien el
                                         al encarnar, empezamos a padecer                                                          Otro, ese tan desconocido “Yo” que nos
                                         de un Alzheimer ontológico: es decir,                                                     cohabita, a pesar de nosotros. Porque
                                         sufrimos el olvido de la chispa divina                                                    en las antípodas de ese cerebro animal,
                                         que un día se desprendió del núcleo de                                                    por la inestable pero poderosa abertura
                                         la Mente Infinita y que finalmente se                                                     de la conciencia, pareciera existir otro
                                         reconfiguró en embrión biológico con                                                      agujero, mucho más angosto que
                                         memoria en su ADN. Luego, ese olvido                                                      el anterior y menos gravitante en la
                                         se refuerza porque nos creemos el ego,                                                    vida común de todos los días, pero
                                         esa falsa identidad del “fulano de tal”                                                   susceptible de ensanchar con discipli-
                                         que nos creamos como costra defen-                                                        na-    un agujero de luz, una abertura
                                         sora, taponando el recuerdo celeste de                                                    a la grandeza, a la trascendencia, al
                                         nuestro tan antiguo origen.    Al confor-                                                 Otro y su llamado.    Por ese agujero,
                                         marnos con solo cumplir determinados                                                      por esa grieta, si se logra ensanchar
                                         impulsos del programa de la especie                                                       lo suficiente, si    logramos acercar
                                         (reproducirnos para ser padres, por                                                       nuestra elipse planetaria al núcleo de
                                         ejemplo) y cumplir otros tantos roles                                                     su sol, podría entrar en nosotros -como
                                         sociales, podemos seria y gravemente                                                      un poderoso núcleo gravitatorio-    la
                                         desperdiciar nuestras vidas. Esto se da                                                   plena luz, el Otro, luz que filtraría, en
                                         cuando le dejamos a la pauta ejecutora                                                    un orden superior, a todos “los otros”
                                         de estos “programas”, el total control                                                    y al universo todo.
                                         de nuestras existencias, aceptando que                                                     Se trataría de la abertura orientada
                                         sean ellos los que nos impongan los                                                       hacia el encuentro con nuestro “doble
                                         límites a nuestras aspiraciones y deseos.       hombre es equivocarse porque tiene   a    obtener y    que lo humano a veces   secreto y luminoso”, la identidad
                                         Prisioneros de los falsos barrotes de   precisamente “aspiraciones y deseos”,   apenas entrevé fulgurantemente como   profunda o “Yo Superior”. Vale decir
                                         las falsas necesidades que impone la   los que deben avenirse, siempre en pre-  en un “cielo enrarecido”.  nuestro antiguo daimon, que Hermes
                                         cultura de época o la las visiones de   cario equilibrio, con dichas tendencias   Es asombroso lo poco que sabemos   Trimegistos y los sabios egipcios lla-
                                         las ideología, las religiones o de esos   del cerebro animal. Todo se le facilita   de nuestro “yo”, de las infinitas posi-  maban “Alma celeste”, ese “guía Divino
                                         límites le gustan mucho al hombre   si esos deseos refuerzan los instintos   bilidades que se esconden en nuestra   que debemos seguir como a    nuestro
                                         común, prototipo de la especie, porque   de su animalidad. Pero el asunto se   identidad, esperándonos para realizarse.   Genio”, ese Dios cómplice a construir/
                                         le previenen de ciertos sufrimientos   “descuadra” cuando esas aspiraciones   Y estas nunca llegan a la expresión vital   descubrir como fruto del ingente trabajo
                                         que lo harían crecer. Goethe ya lo había   dicen relación más con otras nostalgias,   ni a su genuina realización al confor-  por el    despertar, al cabo de ser fieles a
                                         advertido preclaramente cuando en el   con ciertas emociones superiores, con       marnos con ser    lo que ya somos.   sus llamadas, imágenes, apariciones y
                                         Fausto nos recordaba que el destino del   otras condiciones o posibles poderes   Generalmente fracasamos en el intento   sutiles seducciones.


           Panoramas.                                                                 Quinchamalí


                                                                                      “Quinchamalí muestra su Patrimo-
                                                                                      nio”, se tomará el centro de eventos
           Cine: Destino final                                                        “La Guitarrera” los próximos sábado
                                                                                      24 y domingo 25, invita a que toda
           El capítulo más reciente de la exitosa franquicia de New Line Cinema lleva al público de   la comunidad chillaneja pueda vivir
           regreso al comienzo del retorcido sentido de justicia de la Muerte—“Destino Final lazos   una experiencia única.
           de sangre”.  Atragantada por una violenta pesadilla recurrente, la estudiante universitaria
           Stefanie regresa a casa para encontrar a la única persona que podría romper el ciclo y   Lugar: Quinchamalí.
           salvar a su familia de la horrible muerte que inevitablemente les espera a todos.  Horario: 19.30 horas.
                                                                                      Entrada: Desde las 11.00 horas.
                                                                       Lugar:
                                                                       Cinépolis
                                                                       Chillán.
                                                                       Horario:
                                                                       1www.cinepo-
                                                                       lischile.cl.
                                                                       Entrada:                                     Jubiladas en cuarentena
                                                                       www.cinepo-
                                                                       lischile.cl.                                 La Compañía Temachi ha preparado varias actividades
                                                                                                                    para este mes. Una de ellas es la exhibición de la obra
                                                                                                                    “Jubiladas en cuarentena”, una pieza que nació en pan-
                                                                                                                    demia y que se volverá a exhibir a través de Zoom este
                                                                                                                    23 de mayo a las 19.00 horas. El link para ingresar a esta
                                                                                                                    función online gratuita está en www.temachi.cl.

                                                                                                                    Lugar: Zoom.
                                                                                                                    Horario: 19.00 horas.
                                                                                                                    Entrada: Gratis.
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