“Nancy Flores es un ejemplo de cómo las mujeres somos el motor de la agricultura familiar campesina”, afirmó Merino; y cómo las herramientas que entrega Indap en asesoría, y los instrumentos de fomento son un eje decisivo a la hora de fomentar el crecimiento y desarrollo de los pequeños agricultores que quieren una mejor calidad de vida”, destacó.
Nancy Flores, se dedica en forma intensiva y con técnicas ecológicas a la producción de hortalizas al aire libre y bajo invernadero en el sector Huampangue, en la comuna de San Nicolás. Posee una superficie predial de solo 5.000 m2 y un total de 750 m2 bajo plástico, distribuidos en 5 invernaderos de diferentes tamaños, que riega con un pozo noria y en forma reciente con un pozo profundo, más una bomba con energía fotovoltaica y riego por goteo. Además de los invernaderos, cultiva hortalizas al aire libre y un huerto de frutales biodiversos donde destacan cerezos, membrillos, paltos, naranjos y olivos.
“Gracias a Indap nos capacitamos, una capacitación tras otra y también entendimos que vale la pena ser sustentable”, reconoció Nancy Flores. Por lo mismo, se ha esmerado en ir incorporando energías no convencionales para trabajar, como paneles fotovoltaicos para realizar el riego e invernaderos de tecnología israelí, con inversión Indap, de acero galvanizado y cubierta con una durabilidad de hasta 15 años, lo que evita el recambio constante de plástico. Todos estos manejos, garantizan a sus consumidores un producto saludable, inocuo y de excelente calidad, tanto así que muchas veces, “cuando se me acaba un producto como la rúcula, me esperan hasta que tengo otra vez, porque saben que mis productos son de buena calidad”, destacó, para lo cual produce biofertilizantes: humus de lombriz, compost y otros biopreparados para la prevención de enfermedades.
La productora comercializa sus productos en forma directa en el Mercado Campesino de San Nicolás, del que es presidenta, además de tener clientes directos de Chillán y otros que llegan directamente a su predio. También es integrante de la Ruta Agroecológica de San Nicolás, la que es visitada por productores y visitantes de diferentes puntos del país, interesados en conocer su experiencia ecológica de producción.
“Partí con un invernadero chiquitito de túnel PVC de 3x 4 metros”, relató Nancy; “en ese tiempo criaba chanchos y trabajaba como temporera. Pero conseguí entrar al Prodesal y el primer año no aprendí bien el manejo, reprobé un año, pero después empecé a tomar todas las capacitaciones y ahí me di cuenta de que yo podía”.
En esos tiempos, empezó a vender en un carrito y en una caja platanera. Después tuvo su primer invernadero grande y más tarde, siguió escalando a uno de mayor capacidad. “Tuve que salirme de la pega, porque los invernaderos, más la huerta al aire libre, me dieron más ánimo, me puse atrevida. Empecé a hacer otro invernadero, sacábamos hartas lechugas y me empezó a ir bien. Ahora no paro, con los invernaderos no hay detención, los trabajo todo el año”, describió, agregando que “estoy feliz, porque tengo mi propia plata, mi propio tiempo, y con los invernaderos no tenemos que estar trabajando a toda agua en invierno. Lo que más desearía es que los que entren a Indap le pongan empeño, es una buena herramienta, que cree en uno y le facilita las cosas, se puede lograr”.