La propuesta consiste en el uso y aprovechamiento de la genética (germoplasma) presente en las parvadas campesinas de pavos en el secano costero de la región, poblaciones con alto grado de adaptación a las condiciones ambientales locales y generadoras de pavo de campo, un producto reconocido culturalmente en la región, mediante un programa de identificación y diseminación de reproductores superiores para la producción de carne.

El proyecto, impulsado por FIA y financiado por el Fondo de Innovación para la Competitividad Regional FIC-R de Ñuble, consiste en identificar genética superior de pavos locales para la reproducción; mediante la identificación, registro de crecimiento, características de canal y postura en parvadas; con el fin de aprovechar su resiliencia, rusticidad y adaptabilidad a condiciones ambientales del secano interior de Ñuble, contribuyendo a conservar una población patrimonial in situ y en condiciones productivas.

La investigación, que comenzó en 2016, se realizó en la región, según el estudio preliminar, porque “en comunas del secano interior de Ñuble existen numerosas parvadas de pavos que la cultura campesina utiliza tradicionalmente como fuentes de ingresos extras. Un 88% a 96% de los sistemas están manejados por mujeres”.

También el proyecto contempla la participación de las familias que viven en la comuna de San Nicolás, específicamente, quienes dan vida al Comité Coordinador. En total son casi 30 familias beneficiadas.

Entre los objetivos específicos del proyecto —que aún se encuentra en desarrollo— está también analizar el impacto de la intervención genética sobre la sustentabilidad del sistema campesino, la biodiversidad y la seguridad alimentaria.