Estos programas van en directo beneficio de los agricultores de Ñuble que están en un nivel más avanzado de comercialización, indicó la directora de Indap Ñuble, Tatiana Merino. “Con su ingreso al programa SAT, esperamos que los pequeños productores logren un mayor impacto económico en sus sistemas productivos, con asesoría técnica especializada que les permita mejorar sus métodos y técnicas de cultivo, pero además, rentabilizar sus negocios agrícolas y lograr un mayor acceso a los mercados”, destacó Merino, ya que al focalizarse en un solo rubro, se adecúan los programas de acompañamiento; adicionalmente, al tratarse de productores con un mayor potencial comercial, los proyectos a los que pueden postular son de mayor cuantía, comentó.

Además, su egreso de Prodesal es también un reconocimiento a su capacidad productiva, ya que estos productores ya son microempresarios, “porque en su paso por Prodesal lograron las habilidades necesarias para producir y comercializar sus productos, y eso es un orgullo para Indap”, agregó.

Actualmente, Indap Ñuble atiende a 1.158 usuarios SAT en 29 unidades operativas en los rubros ganadero, apícola, berries, hortalizas y viñateros, mientras en Prodesal los usuarios que son atendidos en la región llegan a 8.207 productores.

Adicionalmente, el egreso de los agricultores abre la posibilidad de que la misma cantidad de pequeños productores puedan ingresar a los programas Prodesal que ejecutan los municipios en convenio con Indap, donde el foco está puesto en asesoría multirubro para la agricultura familiar campesina.

El caso de Sergio Lara


Sergio Lara, innovador y empeñoso productor usuario de Indap, junto a su esposa Mariela Orellana y uno de sus hijos, Ignacio, han logrado sacar adelante la empresa familiar “Parcela El Esfuerzo” y hoy se encuentran en una etapa de expansión y soñando con nuevos desafíos.

Usuario del SAT de Hortalizas Indap, Lara ha potenciado el desarrollo económico y social de su empresa familiar campesina, gracias al convenio de comercialización Indap-Unimarc, que permite a los usuarios de Indap acceder con sus frutas y hortalizas como proveedores en establecimientos de esa cadena en el marco del programa “100% Nuestro”.

“Hoy estamos entregando en un supermercado y al mercado mayorista, y con un sello que nos distingue como productores de Ñuble, donde mostramos la calidad de lo que se produce en estos campos”, indicó el productor, quien este año llegó a los 100 mil kilos de zapallo de guarda.

Además de zapallos, tiene un invernadero donde seca ají para la elaboración de agroprocesados, uno más de los productos que este agricultor muestra con orgullo.

“Este ha sido un proyecto y un esfuerzo de muchos años, que empezó cuando yo tenía 7 años”, contó su hijo Ignacio, hoy profesional. “Ha sido un proceso escalonado y un trabajo constante de mi mamá, mi papá y a su visión personal, mi hermano Valentín. Ha sido un proceso largo, con el trabajo de todos, pero sobre todo, de mi papá, de su empeño en buscar nuevos proyectos”.

Sergio Lara lo ratifica cuando relata como partió arrendando un terreno y trabajando con bueyes prestados. Hoy, el fruto de su esfuerzo se refleja en 24 hectáreas, que ha sacado adelante con tesón y gracias al apoyo de Indap en diversos proyectos, para la instalación de una bodega y riego, lo mismo que su esposa Mariela, usuaria del Prodesal.

Ahora, ya asentado, Sergio Lara y su familia pueden estar tranquilos; sus dos hijos ya son profesionales, gracias a su esfuerzo en el campo, pero él no descansa. Ahora se enfoca en lograr nuevos proyectos para la pequeña empresa, con la mirada puesta en aprovechar su entrada a estos exigentes mercados gracias a los zapallos y continuar expandiendo sus rubros, con paltas y cítricos, como limones y clementinas, porque no se cansa de soñar e innovar.