En esta nueva estrategia la confusión sexual es la herramienta base utilizada para el control de la plaga. Si el año pasado el Servicio entregó este dispositivo a predios de 4 hectáreas o menos en el 100% de su superficie, este año se decidió ampliar su cobertura a los viñedos de hasta 15 hectáreas que están dentro de las áreas de control de la plaga. En tanto, para los predios de uva de mesa, arándanos y ciruelo, la cobertura será para huertos de hasta 5 hectáreas para el 100% de su superficie. Es así como se proyecta alcanzar este 2021 aproximadamente una superficie de 44.500 hectáreas productivas de aporte SAG a nivel nacional, esperando llegar aproximadamente a unas 120.000 hectáreas con el aporte privado.

Instalan confusores


Precisamente, el SAG comenzó la instalación de emisores de confusión sexual en zonas urbanas de 14 comunas de la Región de Ñuble, como parte de las medidas destinadas a contener la Polilla del racimo de la vid (Lobesia botrana) y evitar que se propague a viñedos y huertos frutales.

“El manejo de la plaga en las áreas residenciales es un elemento fundamental para el control de la Lobesia botrana en Ñuble. Con el uso de los confusores sexuales, apoyamos a la ciudadanía a mejorar la sanidad de sus parrones y disminuimos el riesgo de que esta polilla se vaya hacia los sectores rurales, contribuyendo al desarrollo agrícola y las exportaciones de la región”, explicó el director del SAG Ñuble, Eduardo Jeria, quien valoró la buena disposición de la comunidad.

Personal del SAG está instalando casi 280 mil emisores de confusión sexual en sectores urbanos de las comunas de Bulnes, Chillán, Chillán Viejo, Coelemu, Coihueco, El Carmen, Ñiquén, Pinto, Quillón, San Carlos, San Ignacio, San Nicolás, Quirihue y Yungay, abarcando una superficie de 562,5 hectáreas.

Las brigadas del SAG están instalando los dispositivos en patios y en arbolado urbano donde existe una mayor presión de la plaga o que se encuentran cerca de áreas productivas.

Los confusores son pequeños dispositivos plásticos que se instalan en los árboles frutales emitiendo una feromona sintética que desorienta al macho, impidiendo que se encuentre con la hembra para reproducirse, lo que se traduce en una disminución de la descendencia y de los daños en la fruta. Dicha técnica ha presentado resultados positivos reportándose una caída de 61% en las capturas de la temporada pasada en los predios en donde se aplicó esta medida de control.

Los dispositivos que se emplean no son tóxicos ni provocan problemas a la salud de las personas, animales, abejas y otros insectos.

Reparto compartido


Tal como en temporadas anteriores, se estableció un sistema de reparto compartido, donde el SAG aporta un porcentaje de la CS a los productores de las especies en zonas de control, de acuerdo a la superficie que tenga cada predio y dependiendo de la especie de la cual se trate, ya sean arándano, ciruelo europeo y japonés, vid de mesa o de uva vinífera. La diferencia debe ser adquirida por el productor.

En el sitio web del SAG se encuentran publicados los listados de los productores beneficiados con feromona. Es importante considerar que cualquiera sea la elección del tipo de emisor de feromona a utilizar por parte del productor, deberá mantener cubierta la superficie de su predio por un período no menor a 150 días.

Además, es obligación de los productores presentar antes del 30 de septiembre de 2021 su Plan Operacional de Trabajo (POT), que describe el conjunto de medidas fitosanitarias que debe realizar al encontrarse dentro de un área reglamentada por la presencia de Lobesia con el objetivo de eliminar la plaga y evitar su dispersión.

Systems Approach


Para conocer el alcance del Systems Approach aprobado por Estados Unidos para los arándanos provenientes de las regiones de Ñuble y Biobío, alrededor de 180 productores y representantes de plantas exportadoras participaron el 19 de agosto en la jornada en línea organizada por el SAG y el Comité del Arándano.

El Systems Approach es un conjunto de medidas de manejo del riesgo de plagas que permite garantizar las condiciones sanitarias que impone Estados Unidos como alternativa a la fumigación con bromuro de metilo, que disminuye la calidad de la fruta, además de quitarle su condición de orgánico.

El director del SAG Biobío, Iván Ramírez, destacó que “este es un sistema que tenemos que promover como Servicio, pero que también tenemos que cuidar, porque nos fue muy bien en la temporada pasada. En el Sitio de Inspección en Cabrero inspeccionamos alrededor de 4,2 millones de cajas de arándanos frescos, de los cuales el 37% corresponde a fruta producida bajo la modalidad de Systems Approach para Biobío y Ñuble. Es un volumen importante que estamos sacando bajo esta modalidad y que tiene un tratamiento distinto en cuanto a su aceptación y su precio en el mercado de Estados Unidos. Además, esto tiene otra implicancia en el caso de los orgánicos, pues se reconoce dicha condición en el destino”.

Por su parte, el director del SAG Ñuble, Eduardo Jeria, indicó que “la tasa de incremento de superficie y de huertos que tienen la posibilidad de ingresar en la Región de Ñuble es sumamente importante. En la temporada 2020-2021, el número de predios que tenían la posibilidad de incorporarse a Systems Approach fue de 259, de los cuales 93 se adscribieron a esta metodología de trabajo. Para la temporada que viene el número de predios que puede participar llega a 347, gracias a los avances logrados en el control de Lobesia botrana. También destacar la aprobación de un proyecto FNDR para complementar las acciones de control de la plaga en sectores urbanos”.

Por su parte, Andrés Armstrong, presidente del Comité del Arándano, señaló que “el Systems Approach permite a gran parte de los productores de las regiones de Ñuble y Biobío tener mejores condiciones de acceso al mercado norteamericano. Necesitamos cuidar este Systems Approach porque nos permite llegar con fruta no fumigada y competir en mejor condición con arándanos producidos en otras partes del mundo”.

En la oportunidad, Erik León, encargado de la sección de productos agrícolas y forestales del Subdepartamento de Certificación Fitosanitaria del SAG, explicó el plan operacional y aspectos asociados a la certificación para la exportación de arándanos provenientes de las regiones de Ñuble y Biobío bajo un Systems Approach; mientras que Álvaro Garrido, jefe del Subdepartamento Programa Nacional de Lobesia botrana del SAG, dio a conocer la situación de la plaga, con énfasis en Biobío-Ñuble y la actualización de la situación oficial de productores bajo Systems Approach.

En las regiones de Ñuble y Biobío existen 647 huertos de arándanos, de los cuales 439 pueden adscribir al Systems Approach, totalizando una superficie de 4.060 hectáreas.